Próximos a las elecciones presidenciales en Estados Unidos, los dos candidatos, Barack Obama y Mitt Romney, están prácticamente empatados en el número de votos. Esta vez, Obama ha optado por una campaña con visión hacia el futuro por lo que los demócratas repetirán el slogan "Forward" y sorprenderán a los ciudadanos con los testimonios de ellos mismos poniéndolos como protagonistas dentro de la campaña.

Por otro lado, los republicanos, acompañados por los votos de las familias conservadoras norteamericanas, estarán enfocados en conquistar a los votantes y no solo alcanzar el voto anti-Obama. Sin lugar a dudas el voto hispano es el que más influencia tiene en estas elecciones, sobre todo para Obama, quien tiene como mayor número de votantes a los miembros de la comunidad latina. Mitt Romney aún no toma la decisión de considerar estos votos como estrategia en su campaña. Se comenta mucho que se escogerá como vicepresidente a Marco Rubio, quien ayudaría a conectar al candidato con los hispanos.

Como es costumbre, se celebrarán las grandes fiestas en las que se busca alcanzar el voto de los ciudadanos. En Tampa, Florida, se dará la primera Convención Republicana entre el 27 y 30 de agosto y la Convención Demócrata tendrá lugar en Charlotte, Carolina del Norte, entre el 3 y 7 de setiembre.